domingo, 15 de mayo de 2016





El Icue y …cuando los mayos se largan con copa

“La verdadera salida está precisamente donde no hay salida alguna para el juicio humano”. (León Chestov)

El Icue, este año sí, desea disfrutar la alegría de un mayo con copa. Hoy ha concluido con éste FC Cartagena 1 – San Roque de Lepe 1 una desgraciada temporada, tardes y tardes apáticas sin futbol, una temporada abúlicamente desgraciada en algunos partidos en la que no hemos podido celebrar nada. Hoy acaba de cerrarse. ¡Por favor que se largue ya!, porque todo, absolutamente todo, lo hemos sentido como ese gris que no es otra cosa que el fundido del blanco y del negro de nuestros colores. Ha sido como un querer y no saber cómo mostrárnoslo. Quisiste, querido Icue, que todo hubiese vuelto a empezar cuando se acercó hasta la orilla de La Rambla ese Monte-agudo y hasta te ilusionaste, pero tuviste que esperar, encerrado como un perro rabioso. Así se siente mi Icue y nuestro FC Cartagena después de todo lo de hoy y así debe de sentirse la efesemanía y toda su corte celestial.

He sentido esta tarde tanta desilusión, tanto desánimo, aunque se haya conseguido el objetivo, dejando pelos en la gatera, que ni me esfuerzo en pretender que la Liga de la próxima temporada nos haga ilusión. Puede que la próxima temporada nos situemos en puestos privilegiados para celebrar puestos de playoff y puede que hasta sea una temporada sin turbulencias y se consiga ese alborozo como aquel de la tarde de Alcoy y que tanta ilusión nos hizo. Pero ¿de qué ha servido meterle ese solitario golito esta tarde al San Roque de Lepe? Visto lo visto, ha sido lo normal, si tomamos en consideración la diferencia existente en este momento entre los dos equipos. ¿De qué ha servido que hoy ni apareciesen los Menudo, Sergio García, Chus Hevia, Indiano, Cristo y…si Limones no llega a detener ese penalti mal tirado a su izquierda por el lopero Chacopino? Ha servido para que el FC Cartagena pueda tomarse esa copa que esta tarde le han servido en una vasija tan grande como una azumbre. 

Convendrás, querido Icue, que la temporada que esta tarde ha echado el cerrojazo, ha sido una temporada de mucha desidia, de algún nerviosismo, de algo de postureo y hasta una temporada de incumplimientos. Quiéranlo reconocer o no, se nos dijo al comienzo, ¿lo recuerdan?, que ésta iba a ser una temporada de ascenso. No ha sido así. Ha sido una temporada de desidia y tristeza y así hemos llegado hasta los mayos, aunque con copa y éstos, aun así, son muy tristes. Y gracias, porque hasta que llegó el de Valdeganga pudo suceder que nuestro Cartagena se despeñase hasta caer en el fondo de su tumba, esa tumba que nadie quería, pero que se abrió con la inexperiencia entrenadora de Víctor. El Icue, estimado lector, siente decir que esta temporada se estuvo flirteando con la muerte y, ya saben, el flirteo con la muerte es más poderoso que el romance con la vida, y más absorbente, y ya sé que es humano buscar sensaciones nuevas y la de la copa habría sido para el FC Cartagena como lo fue aquella contra el Barcelona de sobra conocida y cantada.


En condiciones normales, el FC Cartagena tendría que haber tomado la copa con más facilidad que cuando el cartaginés Asdrúbal “el Bello” año 227 a. C. fundó Qart Hadasht, pero no ha sido normal, ha sido una temporada donde hubo una mezcla de desolación y aburrimiento, donde nos sentimos provincianos en el convencimiento de que la Liga era para gente de Murcia, como así ha sido. Esta ha sido una Liga, además, dubitativa, vulgar e imprevisible. 

¡Ay querido Icue!, a mí, también a la efesemanía, le hubiera gustado conocer el esplendor de los mayos, con la euforia de una copa bien servida, con el subidón de saber que, allá por septiembre, podríamos medirnos con el mundo, sin la vanidad de saber que hasta llegaremos a estar entre los elegidos para que la efesemanía espere de su equipo otra gran proeza. Sin la Liga, los otros trofeos, si los hubiere, son un deprimente premio de consolación, reflejando esa impotencia como cuando los encargados de los internados nos mandaban a la cama antes de que pudiéramos ver los goles de la jornada en el blanco y negro del Estudio Estadio.

El Icue, ahora que todo se ha acabado, sigue sin saber dónde quería estar este FC Cartagena. No es esto lo que tenía planeado. No importa, o sí. Habrá que convencerle para la próxima temporada de que La Liga es una chica que también le quiere y que es, a su manera, muy atractiva. El Icue sabe y, también el Efesé, que en su historial hay algo de fatalidad y pesa el estar enamorado de otra inaccesible porque no se supo estar a la altura de conquistarla cuando correspondía. Sería inconcebible que el FC Cartagena tirara a la basura, de nuevo, la Liga la próxima temporada. Conocemos, lo hemos comprobado, que éste nuestro Cartagena no es un equipo superlativo ni está rodeado de grandes genios y que lleva unas cuantas temporadas caracterizándose por la grandiosidad de sus caídas y por eso nos siguen entrando las dudas.

Aquí les dejo, seguiremos estando en contacto, acordándome de esas palabras que escribió León Chestov: “la verdadera salida está precisamente donde no hay salida alguna para el juicio humano”. Y continúa la cita: “No se vuelve uno a Dios sino para obtener lo imposible”. ¡Ay, ay, ay!

Pedro-Roberto J.P. desde el “Rincón del Icue”. Dies 5/15: Idus Maiae. Nº 8 en el Efesehistoria.

Texto El Rincón del Icue. Fotos http://qapta.es/. Copyright ©
Next
This is the most recent post.
Entrada antigua

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Toggle Footer