miércoles, 12 de marzo de 2014





Fran de Paula Gutiérrez Linares, un quiebro generacional



Estimado Presidente, estimado Fran de Paula: ahora que no sabemos si te quedas o te vas y puesto que todo lo has envuelto con papel, no de celofán, que es lo tuyo, y sí con envoltorio de Due Diligens, quiero expresarte, como Icue que soy de tu ciudad, también de la mía, lo que sigue: 

Al Icue, desde el pasado mes de Julio, le ha gustado todo, absolutamente todo lo que has hecho por nuestro FC Cartagena, fundamentalmente el no querer mezclarte con esos nuevos ricos que se los llevó la crisis y, de igual manera, no desear revolverte con esos otros viejos nuevos ricos, al entender que ambos, los nuevos o viejos fueron y son especímenes grotescos para quienes el hecho de amasar dinero solo constituyó un fin en sí mismo. Además el Icue entiende que, por esa tu actitud, se te debiera encuadrar en ese grupo de treintañeros que están cambiando el mundo a golpe de talento. Ahora mismo pienso en Zuckerberg, fundador de Facebook, pocos hay como él, pero son suficientes para constituir una tribu. A ellos me refiero pensando en tí. Te aseguro que voy a seguir tus andanzas con esa curiosidad que poseen los entomólogos viciosos. 

Déjame decirte que tú has sido el artífice, como si fuese una travesura de tus años universitarios, de un cambio en nuestro Cartagena que ha abierto las puertas al reconocimiento futbolístico de todo ese entramado de intereses y personas que hasta que tú no llegaste no se fiaban de este tu Club. Abriste las puertas del éxito de la efesemanía casi sin salir de clase. Y al poco tiempo la universidad del cartagenerismo se te ha quedado pequeña y estás a punto, me dicen, de abandonarla. Hoy, amigo, eres uno de los dioses de la nueva estructura cartagenerista.

Eres, así lo piensa el Icue, un quiebro generacional. Has reventado el lenguaje casposo y dictatorial que se utilizaba, cuando sucedía, en las entrañas del subsuelo del Cartagonova, y hasta, también, el dinero mismo. Ahí está la compra de nuestro Cartagena por parte de Sporto Gol Man 2020 SL, una jugada que a D, Francisco Gómez Hernández no le ha supuesto desgastar ni media neurona. Tú, amigo Fran, le has movido la silla y no ha sido en vano mostrándole su impotencia ante su poderío. Y es que, amigo, mis respetos, porque eres capaz de cambiar la Humanidad sin apearte de los vaqueros.

El Icue, que también fue joven y universitario de La Central madrileña en los tiempos del mayo del 68 y capaz de dar algún quebradero de cabeza junto a los históricos que agitaban las barricadas miméticamente con el mayo francés, aunque finalmente resultáramos engullidos por el sistema para defender aquello en lo que creíamos con garras de hierro. Sé que lo tuyo es distinto. También el tiempo. Tú eres un cachorro de las nuevas tecnologías y tendencias. Tú estás en otra onda. Tu patrimonio es la inteligencia y tu doctrina, la propia vida. Y los otros intereses son, pienso, reliquias sepia. 

Me gusta que hayas cumplido escrupulosamente con el relevo generacional. La juventud jamás prescribe, fundamentalmente cuando reproducen, mejorados, los esquemas de sus inmediatos predecesores, y eso es lo que has hecho. Recuerdo que lo primero que cambiaste fueron esos patrones estéticos. Te consideraron ser un pipiolo, mientras ellos sólo hablaban de dinero, de estrellas Michelin, de coches y jets privados. O sea, de nada.

Permíteme decirte que, ahora que va a empezar la primavera y ya pasean las madres con los niños de chupete en el carro con ojos de felicidad, pueda acercarme hasta tu Pinatar Arena para saludarte, charlar tomando el sol y, en sus gradonas, vivir la primavera con todos los sentidos, y siempre con sed de beduinos. Vale.

Texto El Rincón del Icue. Fotos http://qapta.es/. Copyright ©

2 comentarios:

  1. Has dicho verdades como templos .
    Fran de Paula ha hecho las cosas muy bien porque las ha hecho con el corazón. Estaremos contigo te vayas o te quedes, aunque este FC no sería lo mismo sin ti lo que queda de temporada. No cambies nunca.

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  2. Enterado que sigues hasta final de temporada. Me alegro, tanto por el club como por ti. Por el club porque perdería un gran activo, y por ti, porque sé que no te gusta dejar nada sin concluir o con flecos. A ver si los nuevos dueños te dejan seguir trabajando como hasta ahora. Enhorabuena a ambos.

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