domingo, 6 de marzo de 2016






Sívori un medio-punta por el que los de San Mamés pagaron 348 millones de pesetas

“Es un delantero que se mueve bien y que da muchos problemas arriba”. (Luis Fernández, entrenador del Athletic de Bilbao)

De entrada y para centrar en sus justos términos el REMEMBER de hoy diré que el Icue, no por méritos propios sino por edad conoce, por haberlo visto jugar por esos campos de Dios, campos como fueron Mendizorroza, en el viejo San Mamés, alguno en el viejo Las Gaunas, en el Cartagonova, esporádicamente en el Rubial y el Pitin, al vitoriano y alavés Arturo Igoroin Sanjurjo “Sívori”.
 Han pasado bastantes años, muchos, nunca demasiados, desde que el Icue lo vio corretear por primera vez hasta que anunció su retirada cuando estaba a punto de cumplir 38 años. Han trascurrido algunos lustros desde que el jugador vitoriano debutase en el filial del Alavés en 1995 y dos años más tarde pasase a formar parte del primer equipo de su ciudad y desde allí, como un todo terreno, marchara a Bilbao,  Córdoba y Leganés hasta que, en 2003, llegó a Cartagena para permanecer durante cinco temporadas en el primer equipo de la ciudad y, posteriormente, fichar por Águilas, Caravaca, Mar Menor y La Unión y guardar las botas en el armario del recuerdo después de disputar más de 500 partidos y marcar casi 100 goles. Siempre lo tuvo claro ya que siempre manifestó: “tengo intención de seguir jugando hasta que las lesiones me respeten”. Ahí es nada, y otra cosa: pasar de Mendizorroza al club de Ibaigane le costó al club de Los Leones de San Mamés 348 millones de las antiguas pesetas. Está claro que el jugador tenía valía.

Este larguirucho, fino y nervioso jugador siempre tuvo empatía con sus entrenadores y quizás fuese el valmasedano José Manuel Esnal Pardo “Mané” el que más le marcase. Él fue quien decidió darle la oportunidad de subirlo al primer equipo del Alavés estando en el filial y el que apostó por él desde el principio. 

Fue un jugador que compartió vestuario con figuras futbolísticas de la talla del rocoso y duro Antonio Carmona Herrera, “Karmona”, que hizo que el Alavés fuese el equipo más agresivo de la Liga y, probablemente, el más duro.  Pero de la dureza ya hablaremos luego. Tuvo compañeros de la talla de Serrano, Urzaiz, Calandria, Webó, Fhilippe Toledo y Julio Salinas…con el que llegó a compartir habitación en el Alavés, le llegó aconsejar de muchas cosas, lo tuvo como maestro y, como buen discípulo, aprendió muchísimo de él, tanto dentro como fuera del campo.

Su debut con el primer equipo del Alavés se produjo en la temporada 1996-1997, tras sustituir a Pedro Riesco en un Alavés-Écija. En ese partido solamente jugó treinta minutos y el equipo ganó 5-0. Antes de salir al campo, cuenta, le temblaron las piernas. Y una vez dentro se tranquilizó y todo fue bien. Y de allí, 1999-2000, y por 348 millones del ala, firma por el Athletic Club, donde no tuvo demasiadas oportunidades. Pertenecer a este Club y a ese equipo fue para él increíble. Es cierto que tampoco allí tuvo demasiadas oportunidades, pero fíjense lo que allí había: Joseba Etxeberría, internacional; Urzaiz, internacional, Julen Guerrero, internacional… Ezquerro, Tiko… Uff, querido Icue, ¡estaba la cosa como para jugar!

Y llegó a Cartagena y al Efesé, estuvo cinco temporadas, jugó una fase de ascenso a Segunda División en la temporada 2005-2006, después de finalizar líder del grupo y, ¡ay, ay, ay!, jugó la eliminatoria contra el Vecindario, hubo bastante mala suerte y se perdió 0-1. Fallaron un penalti, hubo balones a los palos…Un partido, lo recuerdan, para olvidar.

Sívori fue siempre un joven futbolista prometedor, por él, lo hemos anunciado, se pagaron 348 millones más dos jugadores: Ibon Begoña y Jon Solaun y un amistoso. El Alavés, último club vasco en unirse a la Liga de las Estrellas, estuvo encantado con la operación. Consiguió lo que quería; evitar sonrojos como los de Iván Campo o Ezquerro, últimos ejemplos de cómo hombres de la tierra se le escapaban de las manos. ¡Ay amigo Icue!, átate bien los machos, nuestro Sívori llegó a firmar para permanecer en el Athletic por cuatro campañas y con una cláusula de rescisión de 2.000 millones de pesetas. Y esto, como se darán cuenta, no fue un mero cambio de cromos. Y este chaval, menudo y espigado jugo en el Efesé y correteó por el Cartagonova. 

Pero, ¿quién fue ese futbolista que estuvo jugueteando en serio más que en broma por el Cartagonova? Una persona muy vitoriana. El único fruto exportable de la cantera albiazul en muchos años, posiblemente desde Ernesto Valverde. Un Jugador que Mendizorroza casi lo vio actuar. Un futbolista con mérito, a pesar de su juventud y que acababa de despuntar en el filial de Tercera División, pero que, de repente, se hizo indispensable en el equipo que ascendió en mayo a Primera después de 42 años. Un jugador con talante ofensivo, joven, de 181 centímetros de estatura y alrededor de 70 kilos, todo un referente de la afición alavesa, con un sobrenombre heredado de su padre, ex futbolista, que a su vez recogió el apoyo de un viejo jugador argentino. Su único mérito, y qué mérito, fue el ser un medio punta rápido y, ante todo, incansable. Es cierto que le faltaba llegada, pero siempre le sobró coraje, desenfado y bien jugar. Todo un jugadorazo para el Efesé, allá en la temporada 2003, cuando llegó a la Ciudad Portuaria. Es aquí donde se mostró como un jugador de presión asfixiante capaz de ahogar al contrario. Fue un jugador de riesgo, con estilo y calidad. Fue Sívori. 

Pedro-Roberto J.P. desde el “Rincón del Icue”. Dies 3/6: pridie nonas Martias. Remember Nº 13.

Texto El Rincón del Icue. Foto http://qapta.es/. Copyright ©

PD. De momento, no le ha ido mal del todo. Aún no perdido ni un solo partido. El problema es que solo ha ganado una vez.  Y el de Valdeganga va, se lo cree y hasta lo justifica: “El balance de mi primer mes aquí, en cuanto a trabajo y predisposición de todos los futbolistas, es muy bueno. El balance de resultados, no tanto”. 

El FC Cartagena necesitaba conseguir algo más de un punto fuera de su casa y olvidarse ya esos fantasmas que pueda haber. En Jaén tampoco ha sido. Es cierto que a nivel defensivo el equipo no encaja goles, pero a nivel ofensivo este equipo no genera oportunidades de gol y si crea alguna sus delanteros no meten goles, de ahí que el Icue no entienda las palabras de Monteagudo cuando dice: “Estamos trabajando a fondo para cambiar la idea de que no tenemos gol”. Puede ser, no dudamos de su empeño, pero sí de su eficacia: o sus enseñanzas no están claras o sus alumnos no las asimilan o el interés de uno por enseñar y el de los otros por aprender no es eficaz o ese vestuario es la casa de tócame Roque, que puede ser y experiencias consolidadas tienen. Y claro, así les va. Y, además, esa carencia, ese estar sin gol y no ver puerta es un impedimento, lastre, dificultad, traba, freno, obstáculo y rémora para tomarse una copa. Los empates no sirven para ocupar ese puesto copero ni tampoco para llegarse hasta la cantina y consumir un trago de buen vino. ¡Ay, ay, ay!

Real Jaén CF 0-0 FC Cartagena

ALINEACIONES


Real Jaén CF: Felipe Ramos; Luis Pérez, Moreno, Fran No, Mario, Fede (63' Bardanca), Álex Cruz, Pablo Ortiz (34' Quesada), Trujillo (72' Nuno Silva), Molina, Santi Villa. 

FC Cartagena: Limones; Ceballos, Moisés, Ayoze, Jesús Álvaro; Gonzalo (72' Gladestony), Rivero (45' Luque); Cristo, Chus Hevia, Menudo; Fede Laens (67' Juanlu).

GOLES: Real Jaén CF 0 - FC Cartagena 0

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