¡Efesé, Efesé, Efesé!
Desde que
apareció el Rincón del Icue, dentro de poco hará un mes, son muchos los correos
recibidos en los que se me pide conteste y aclare la siguiente pregunta: ¿por
qué al FC Cartagena se le conoce popularmente como Efesé?
El Icue que,
por deformación profesional, desea ser siempre pedagógico y sabiendo que la
contestación va a ser dirigida a todos aquellos lectores no cartageneristas, éstos
ya saben su respuesta, le apetece contestar
esa pregunta que todos aquellos aficionados al fútbol, mayoritariamente fuera
de Cartagena, aunque también a los de dentro, me han formulado.
Diré que prácticamente
desde su fundación y al mismo tiempo de su nacimiento aparece esa permanente y
esencial rivalidad entre los dos clubes más representativos de Murcia y de
Cartagena, tanto es así que desde que se apalabraban celebraciones de partidos
amistosos en la mayoría de ellos se terminaba abandonando el terreno de juego entre
una nube de pedradas.
Leyendo a Juan Antonio Garre Clemente nos cuenta que el
aumento del interés por el fútbol en La Región de Murcia propició el nacimiento
de varias publicaciones especializadas en la ciudad de Murcia, destacando una
hojita llamada Murcia Deportiva que publicó su primer número en el mes de julio
de 1919. Poca vida tuvo la publicación, todo en ella fue tan efímero que muy
pronto desapareció. Más tarde y al finalizar el año 1922 la práctica del fútbol
se había asentado prácticamente en toda la región murciana y los aficionados a
este deporte, cada vez más numerosos, comenzaron a demandar alguna publicación especializada,
y ante tal demanda reapareció, 9 de noviembre de 1922, Murcia Deportiva.
Y, ya desde el principio,
entre aquellas hojitas, allí como escondida, apareció en rincón, como de
relleno, un encuadre titulado “En serio y en broma” con el objetivo de hostigar al “enemigo” con comentarios
absurdos, mordaces y hasta ofensivos, fundamentalmente para los equipos rivales
y si éste era el de la Ciudad Portuaria pues miel sobre hojuelas. Era éste un
medio de comunicación con la obligación de dar a los “suyos” una imagen de
seriedad. Debo decir que Murcia
Deportiva era el medio “oficioso” del Real Murcia. Su “redacción” estaba
ubicada en la sede del club y sus redactores no eran otros que ex jugadores y directivos
del Real Murcia. Estos “profesionales redactores”, desde sus primeros escritos,
mostraron animadversión poco disimulada hacia el Cartagena F.C. Este desprecio hacia
el FC Cartagena no sólo aparecía en esa oscura y arrinconada sección “En serio
y en broma”, sino que comenzó a extenderse a través de los editoriales, sueltos
y crónicas de los partidos. Y lo que comenzó siendo jocoso, terminó siendo
hiriente. Los comentarios fueron subiendo de tono y llegaron, en algún que otro
caso, a convertirse en descalificaciones tratando de ridiculizar al equipo, a
la afición, ala ciudad y hasta algún singular periodista rival.
Y es en este contexto cuando el redactor de Murcia Deportiva decidía poner apelativos despectivos y hasta
vejatorios a las publicaciones y a los equipos rivales. Tanto que ese
rinconcito “En serio y en broma” comenzó a incluir un sobrenombre para
dirigirse a ellos. Y hete aquí que, 1924, al constituirse la Federación
Murciana de Fútbol, al Real Murcia no le quedó otro remedio que encontrase con
un rival con el potencial suficiente como para disputarle el título de campeón
regional: el Cartagena F.C. La rivalidad entre el Real Murcia y el Cartagena se
trasladó a la prensa, pues los desprecios de Murcia Deportiva encontraron la
respuesta en el semanario deportivo cartagenero, nacido en 1924, llamado Gol,
que no tardó en plasmar, de igual manera, una continua y clara animadversión
hacia el Real Murcia. Esta circunstancia propició que el Cartagena F.C. se
convirtiera en el blanco de todos los chascarrillos del oscuro rinconcito “En
serio y en broma” de la hojita Murcia Deportiva. Fue entonces cuando un 18 de
septiembre de 1924 apareció por primera vez en las páginas de este semanario la
palabra Efe-se, término que
nace de la transcripción despectiva de la denominación que utilizaban los
aficionados cartageneros para referirse a su equipo, incidiendo de forma
malintencionada en el seseo característico del habla del Campo de Cartagena.
Habrá que decir en honor a la verdad que es aquí, en
este contexto, cuando la utilización de efe-sé aparece escrito en un suelto reseñando
un partido amistoso en el que el Cartagena había perdido por 2-6 ante el
Natación de Alicante.
Si nos damos cuenta la palabra efe-se aparece
gráficamente separada por medio de un guión. Está claro que el “redactor” lo hizo con la intención de diferenciar las dos
letras de la denominación FC para mostrar claramente cuál era la procedencia
del término, viéndose claramente la mala intención del “redactor” de vejar al
cartagenerismo.
Tanto debió gustar el término en la redacción de
Murcia Deportiva que la hojita decidió volver a emplearlo, con evidente mala
intención de escarnecer, en alusión hacia el equipo cartagenero por las críticas
del corresponsal en Cartagena del periódico El Liberal de Murcia a la directiva
de este club tras la derrota ante el Natación. Lingüísticamente aquí ya se
prescindió del guión aunque manteniendo todavía sin acentuación la palabra.
Siguiendo con el intercambio de reproches entre Murcia
Deportiva y la revista cartagenera Gol, la palabra Efesé apareció escrita por primera vez un 6 de noviembre de 1924,
tal y como ha llegado a nuestros días. Con el paso del tiempo la rivalidad
entre el Real Murcia y el Cartagena se hizo cada vez más hiriente y las
menciones, sin perder su intención ofensiva, injuriosa, denigrante y ofensiva
hacia el Cartagena FC. fueron cada vez más habituales.
Pero sucedió que un 19 de diciembre de 1926 el
Cartagena fue a jugar a La Condomina logrando por primera vez en su historia ganarle
en su propia casa en un partido oficial. Esta victoria impulsó al firmante con
el seudónimo de “Penalty”
escribir un artículo en el que se dirigía de forma sarcástica a los periodistas
murcianos que habían vaticinado un amplio triunfo de los granas. “Penalty”, con
intención socarrona y fino sarcasmo, recurrió al apelativo Efesé para indicar que éste ha
sido capaz de ganar en su campo al Real Murcia.
El cariñoso apelativo perduró entre los seguidores
cartageneristas y el diario La Verdad de 3 de julio de 1942 publicó una carta
dirigida por el aficionado Juan Rosique Lambert, a Vicente Bonet, redactor
deportivo de La Verdad en Cartagena en la que solicita del periodista continúe su campaña “para la salvación de nuestro Efesé”.
Y es a partir de aquí, aunque el club haya cambiado en
varias ocasiones de nombre, cuando los aficionados del Cartagena siguen adoptando
este término como un apelativo cariñoso, utilizado para animar a su equipo
alcanzando, a partir de los años 80, gran popularidad. Existe la anécdota que
el público, en los partidos disputados en El Almarjal, y que se ubicaba en el
fondo sur gritaba “Cartagena” y, de forma inmediata, los aficionados del fondo
norte coreaban Efesé,
incidiendo en ese seseo precioso y sonoro del apelativo. Y lo que los murcianos
crearon como un grito peyorativo se convirtió en ese clamor de guerra que hoy
con más fuerza se sigue gritando.
¡EFESÉ, EFESÉ, EFESÉ! es hoy todo un griterío de los
aficionados con matices de una nueva dimensión en este primer equipo de la
ciudad. Es un grito, que no lamento ni bulla, ni gemido, es un digno estruendo,
de todo un gran sentimiento y, fundamentalmente, todo un símbolo del fútbol
cartagenero.
PD. Este artículo tiene su fundamento en la investigación realizado por D. juan Antonio Garre Clemente y publicada en enero de 2010 bajo el título de: “¿Por qué al Cartagena se le conoce popularmente como el Efesé?”, publicado en http://fpfcct.blogspot.com.es/2000_01_01_archive.html.
PD. Este artículo tiene su fundamento en la investigación realizado por D. juan Antonio Garre Clemente y publicada en enero de 2010 bajo el título de: “¿Por qué al Cartagena se le conoce popularmente como el Efesé?”, publicado en http://fpfcct.blogspot.com.es/2000_01_01_archive.html.
Texto La Medusa Paca. Fotos
http://qapta.es/. Copyright ©
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