El
Icue y…el 6 gol de cabeza de Carlos David
“Mil tierras y mil mares navegaron
Buscando aquella tierra tan dichosa,
El mar Mediterráneo atravesaron
Llegando a una ciudad muy populosa”. (Ginés Pérez de Hita)
Les voy a desvelar un pequeño
secreto que muy pocos conocen y deseo que ustedes, efesemaníacos, entiendan.
Las tardes que hay fútbol en el Cartagonova y no estoy físicamente en él me
siento frente
a un ventanal de mi cuarto-biblioteca-escritorio-despacho y hasta lugar de
juego de mis nietos, en el paseo villametrense de Portillo, y con un ordenador
a la izquierda y otro enfrente, escucho y leo lo que narran mis amigos de Onda
Regional. Y es aquí cuando empiezo a imaginar que las orillas del mar, mi mar
Mediterráneo, llegan hasta aquí mismo. Entonces me doy cuenta de que todo lo que
relato lo hago desde la imaginación, lo ideo, lo figuro, además, lo intuyo y hasta
tengo la ventaja de librarme de los humos cigarreros de algún fumador contiguo
de butaca y de algún olor sudoroso sin desodorante que fluye de abajo a arriba
del estadio e incluso me libro, fundamentalmente cuando sopla fuerte el
poniente como esta tarde, de los sudores de La Rambla. Y me pongo a escribir en
ese soñado ambiente construyendo todo un territorio literario de recuerdos e imaginaciones
del partido de la jornada que luego ustedes leen en este su querido Rincón del
Icue.
Hoy con el
resultado que se ha dado esta tarde en el Cartagonova ante el Sanluqueño, 2-1, en
primer lugar me he acordado de los labradores del Campo de Cartagena que,
cuando plantan o siembran sus productos suelen mirar al cielo y gritar de
contentos: “Agua, sol y guerra en Sebastopol”. Pues eso, la cosa ha ido esta
tarde tan bien, el resultado ha sido tan gratificador que, ahora que hasta las
personas y dependencias están de cambio, puede que hasta suba el valor de las
tahúllas. Y en segundo lugar quiero hacer míos los versos de Ginés Pérez de
Hita, poeta lorquino que, señalando que por fin nuestro y vuestro querido FC
Cartagena ha encontrado ese su fútbol exigente, de brega y de compromiso con
una afición y ciudad después de haber navegado por mil tierras y otros mil
mares futbolísticos.
Viendo como comenzaba el partido, incluida la pancarta
en apoyo de la investigación para las enfermedades raras, ese fútbol rápido,
directo por parte de los de Tevenet y ante la aparente desgana de los de San
Lucas de Barrameda repasé, tratando de recordarlos, los goles tempraneros
por los cuales el Cartagena había encauzado desde los primeros minutos sus
partidos y llegué a la conclusión de que no necesitaría para ello un gran disco
duro con capacidad de muchos gigas y más bien algún pendrive diminuto en el que
guardar tal acontecimiento. Y miren ustedes llega hoy el Sanluqueño y zás, al
primer tapón zurrapa. Un mal rechace de Limones y un peor entendimiento de
Zurdo, que le concede un regalo, y va y aparece Peral, minuto 28, para marcar
el 1-0 para su equipo con un gol como caído del ciruelo. Pero cinco minutos más tarde allí estaba
Zurdo, el del regalo anterior, para sacar una falta al borde del área y de un
golazo partir el espinazo del portero sanluqueño y dejar como petrificada a
toda la efesemanía que no estaba acostumbrada, desde que marchó Expósito que
también tenía un guante, a ver el balón dentro desde que sale del pie del
jugador. Ya anteriormente, el árbitro, Carlos López López, vaya racha
lleva este nuestro Cartagena, quiso recordarnos que fue él el que la jornada
pasada y en La Liga BBVA las tuvo con “El Mono Burgos”. Pues nada, obvió un
penalti y tras su erros comenzó a sacar tarjetas, unas amarillas y otras rojas
para dejar a los de Tevenet con 4 bajas para el próximo partido en Granada:
Antoñito, Mariano, Menudo y Zurdo. ¡Puffff!, que racha con los árbitros protagonistas y
con las tarjetas.
Tras el golazo monumental de Zurdo decayó el juego y volvió la apatía y a
jugarse sin ton ni son pero había ganas y hubo momentos en los que apuntaban
esa capacidad devastadora de querer arruinar al rival, pero no había zancada ni
remate. ¡Cuánto le agradaría al Icue que de vez en cuando apareciese la zancada
de mamut de aquel brasileiro de nombre Botelho y el remate de ese santomerano
que hoy se cobija bajo la torre de Hércules! Pero, querido Icue, tenemos lo que
tenemos y contentos estamos.
Y todo se volatizó incluso a pesar del árbitro y aunque el partido estaba
siendo de sofá cama cuando llegó el minuto 66, el Cartagena se sobrepuso al
empate, a los penaltis no pitados y a lo que hiciese falta y, si hace unas
temporadas se hubiera puesto a rezar, esta tarde volvió a echarse al fútbol
como a una vieja amante hasta que apareció, de nuevo Carlos David, ya lleva
seis goles y todos de cabeza, para marcar, minuto 66, el segundo y establecer
el 2-1 definitivo. Después de aquí tuve la sensación de escuchar un partido en
diferido y los minutos fueron transcurriendo como si nuestros jugadores se
hubiesen puesto a matar ratas en La Rambla. Tevenet y sus futbolistas hablaron
de partido trampa, no como reproche sino para alabarlo. Le funcionó. El
Sanluqueño se acobardó, se arrugó como un zagal pequeñajo ante un grandullón
que le iba a pegar una paliza. Y como ya saben no fue así.
Los estudiosos y los entendidos en
esto del fútbol se habrán dado cuenta, que del centro del campo para arriba
definitivamente hay, como diría Aristóteles materia prima y hasta forma
sustancial. Ahí están los De Lerma, Diego Segura, Antoñito, Fernando y Menudo,
que junto a Limones, Fede y el gran Mariano, si dependiese del Icue ya estarían
renovados. Son auténticos y magníficos en el esfuerzo y peleones como
verdaderos gladiadores en el paso de las Termopilas. Y ahí están como
verdaderos candidatos hasta el final y para todo. Lo siento con los que no
estén de acuerdo, es el sentimiento del Icue.
Y hoy como el Icue está radiante, se sienta en su plazuela recordando, ¡ay,
ay, ay!, la jornada con palabras de poeta.
“Un café. La Glorieta.
Rinconadas
Donde el sol se
remansa, alivia, dora,
El cansancio habitual de
las jomadas.”
.
Pedro-Roberto J.P. desde un “Rincón para Doce”. Dies 3/9: ante diem
septimum Idus Martias. Nº 324
Texto El Rincón del Icue. Fotos
http://qapta.es/. Copyright ©
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