Persona y, además,
entrenador de fútbol
“En cualquier momento de decisión lo mejor es hacer lo
correcto, luego lo incorrecto y lo peor es no hacer nada”. (Theodore Roosevelt)
Ahí lo tienen, joven, perfectamente trajeado, como
siempre, pensativo, como casi siempre, preocupado y cómo no queriendo ver la
realidad. Ahí está, recién llegado a Cartagena y, fundamentalmente, al FC
Cartagena: Fue un 8 de mayo de 2005, en el Cartagonova y ante el Tomelloso CF
al que se venció por 1 – 0. Y fue, cómo no, en Segunda División B. Sí, este es
Juan Ignacio Martínez (Alicante 24 de junio de 1964), nuestro Remember de hoy.
Hoy silencioso y ocioso en su retiro de Torrevieja, pero entrenador, no hace
demasiado, muy de moda en la Liga de fútbol española.
Sé, estimado Juan Ignacio, que tienes 52 años, que eres
alicantino y como tú, con razón presumes, del barrio de Rabasa. Sé que eres un
técnico forjado en el fútbol modesto. Desde el base hasta la Segunda B pasando
por equipos como el Alicante, Alcoyano o Torrevieja, Mar Menor y nuestro FC
Cartagena desde donde marchaste a entrenar en lo más alto del fútbol español:
la Primera División y en la UD Levante. Sabe el Icue que en esto del fútbol y
en La Liga hay muchos cracks, muchos jugadores y entrenadores con glamour, pero
hay uno que, partiendo desde el Cartagonova, no hace mucho destacaste por
encima de los demás. Ni Messi, ni Cristiano, ni Javi Varas, ni Guardiola, ni
Mourinho pudieron, no hace poco, quitarte tu momento de gloria. Llegaste a ser
el hombre del momento en el fútbol español, cuando fuiste artífice de que la UD
Levante fuese líder de la Primera división española, por vez primera en su
centenaria historia. Todo un milagro cuando el equipo que entrenabas se puso
por delante de equipos trasatlánticos como el Barça y el Madrid. Todos debemos
reconocerte la proeza de haberle ganado al Madrid de Mourinho
y de que, siempre con los pies en el suelo, fantaseases con ganarle al Barça de
Guardiola. Sí, eran los tiempos que andabas por la ribera del Turia, pero nunca
se te olvidó que tú procedías de otra ribera: la ribera de La Rambla.
¿Recuerdas cuando todas las emisoras de radio,
televisiones y periódicos impresos y digitales te reclamaban? Algo realmente
impensable para un hombre sencillo que tuvo que buscarse la vida por diferentes
caminos hasta poder dedicarse enteramente al fútbol. “Yo soy un hombre muy
normal, que no está acostumbrado a grandes fastos y por eso trato de acostumbrarme
lo mejor que puedo a esta enorme repercusión”. Para explicarme después, sin
detenerse en exceso, en su anterior ocupación como guardaespaldas: "Eso
fue hace mucho tiempo, en 1983, cuando yo tenía 18 años. Mi padre trabajaba en
un bar y un amigo de Alicante me animó para ir a Valencia y trabajar como
guardaespaldas de la Pantoja en una gira que hacía la tonadillera con los
Morancos". "Lo asumí como un trabajo más, aunque yo quería enfocar mi
futuro por otros derroteros", me reconociste una
mañana de febrero entrenando en La Hacienda Del Álamo, cuando nuestro FC
Cartagena y, también el tuyo, se afirmaba en los primeros puestos de la Segunda
División en aquella gloriosa temporada 2009 – 2010. Y con el gusanillo de los
banquillos metido en el cuerpo, empezaste a trabajar como vendedor de libros de
texto y de seguros, ocupación que compaginaste con tus primeros pasos como
entrenador en Tercera, después de haber pasado por Regional y Preferente.
Y aquí lo tienen hoy en el Remember: humilde y realista,
sencillo, amical, religioso y creyente, muy creyente, respetuoso con todos y
hasta, para los tiempos que corren, familiar, muy familiar que sólo busca tiempo, ¡ay aquella temporada de la lejana y fría Pucela!,
para volver a su casa cuando podía para estar con su gente.
El Icue ha escrito bastante sobre él. Es un entrenador al
que aprecia y es una persona a la que estima y a la que hasta le ha tomado
cariño. Siempre dirá el Icue que nunca, bueno, casi nunca, le defraudó. Digo
casi nunca porque todavía espera el Icue cumpla con aquella promesa de
acercarse hasta Garnacha a participar de una comida en la que está pendiente, y
por asar, un lechal y que todavía no ha cumplido para honrarnos con su
presencia. Sabemos lo hará. Es hombre de palabra.
Y hablando de gastronomía diré que el bueno de Juan
Ignacio nunca se conformaba con las sobras de la permanencia de los equipos a
los que entrenó. Siempre quería más, tanto más que entrenando al Levante quiso
el festín de Europa y lo consiguió. Siempre fue un entrenador preparado,
mentalizado, con sus cuentas siempre claras, con ese corazón de tan alto
voltaje que era todo corazón. A la persona de Juan Ignacio siempre le sobró,
corazón, amor a sus equipos, sapiencia y coraje. Disfrutaba en el banquillo y siempre fue y
sigue siendo un técnico capaz de manejar todos los recursos con sabiduría.
Tanta sabiduría futbolística tiene, también de la otra, que siempre plantaba
los partidos motivando a sus jugadores para que saliesen a disputarlos a toda
mecha, cobrar ventaja y gestionarla con su especialidad preferida: defensa y
contragolpe.
Es un entrenador que antes de que sus equipos les diesen
los buenos días a los contrarios ya les habían soltado algún zarpazo. Infundía
a los que entrenaba salir como un tigre recién salido de la jaula, oliendo la
sangre de un contrario hasta sugestionarlos con sus palabras de perfecto y
psicológico entrenador. Sus equipos fueron equipos en plena ebullición, capaces
de succionar a sus contrarios por la hambruna de los triunfos. Recuerdo con
añoranza esos triángulos mágicos sobre los que sus equipos edificaban, casi
todo su ataque, en plena ebullición: cuando no eran Victor, Toché y De Lucas en
el FC Cartagena, allí aparecían Barquero, Valdo y Koné en la UD Levante. ¿Y qué
me dicen de aquellas escenas que los que le hemos seguido tenemos grabadas en
nuestras retinas cuando se acercaba a susurrarle al oído algo al cuarto
árbitro? ¿Y qué me cuentan de ese continuo masticar chicle rumiando cada jugada
del contrario a la espera de un resquicio esperanzador en la siempre numerosa y
ordenada defensa de su equipo?
Y por último tiene el Icue en su retina esa imagen de JIM
cuando ante 1.500 espectadores en el estadio Luzhniki de Moscú, y entrenando al
Levante, un 13 de Marzo de 2014 su equipo perdió ante el Rubin Kazán por 2-0,
aun estando a punto de eliminarlo, cuando nevando a manta y Barkero ya
completamente cojo, en su lastimada rodilla derecha, cupo la épica en la
segunda parte de la prórroga para empatar. La rozó Ballesteros en un disparo
desde fuera del área. El equipo de Juan Ignacio se había descubierto y Dyadyun,
fresco porque acababa de entrar, lo remató en una contra perfecta, conduciendo
al Levante a un fin de viaje en la UEFA Europa League por el que el Levante y
JIM debieron sentirse satisfechos.
Sé, querido Icue, que pasará el tiempo y nuestro hombre,
nuestro entrenador y amigo, ese que estuvo a punto de conducir al FC Cartagena
a la Primera División se siente orgulloso de haber afrontado desde el
Cartagonova esa su primera aventura de haber podido entrenar a un Primera
División en la ciudad que, me consta, tanto ama. Hoy el Icue lo trae con mucho
orgullo en la fotografía del Remember de
ABEL F. ROS.
Pedro-Roberto J.P. desde el “Rincón del Icue”. Dies 1/24: ante
diem nonum Kalendas Februarias. Remember Nº 10.
Texto El Rincón del Icue. Fotos http://qapta.es/.
Copyright ©
PD. Hoy, también, se ha cumplido lo mismo que sucedió la
pasada temporada, el FC Cartagena ha acudido al Municipal de La línea de la
Concepción mermado, con numerosas ausencias, con sueños y añoranzas de ganar y
se ha marchado con rabia, tristeza y revolviéndose contra el acomodo, la falta
de compromiso y esa apatía que algunos jugadores llevan mostrando desde
jornadas atrás. Si ante al Cádiz los puntos eran importantes para intentar
conectar con los equipos que el final de la Liga se van a jugar lo
verdaderamente bonito y difícil, salir del pozo que es la Segunda División B,
hoy era importante puntuar para no quedarse en esa zona donde no ronda el calor,
pero tampoco azota el frío. El Efesé necesitaba ganar y convencer. Y sucedió
que ni lo uno, sino todo lo contrario. Este equipo no debe descuidarse, la
segunda vuelta es cierto que no ha hecho nada más que comenzar y malo es
comenzar a coquetear con los equipos de la zona baja y, de nuevo, terminar sufriendo.
Hoy terminamos diciendo lo mismo que en el anterior
Remember: Hoy tampoco, ¡ay, ay, ay!, estos futbolistas no han sido capaces de
bufar, es decir: de resoplar con ira y furor
y sí de hacer el ridículo. Y el Icue lo seguirá diciendo
mientras esto no cambie y, por las trazas, …
RB Linense 3-1 FC Cartagena
ALINEACIONES
RB Linense: Lolo Soler, Manu Palancar, Gallardo, Olmo, Joe, Chimo
Forner, Juampe, Canario (’53 Zamorano), Espinar, José Ramón y Maurí (’76 Blas).
FC Cartagena: Limones, Mario, Moisés, Ayoze, Candelas (’59 Titi),
Sergio Jiménez, Pepe Palau (’72, Álex Jiménez), Jesús Álvaro, Jonxa, Menudo y
Chus Hevia.
GOLES: RB Linense 3 (‘28 Gallardo; ’83 Zamorano; ’87 Juampe) - FC
Cartagena 1 (‘34 Jonxa)
0 comentarios:
Publicar un comentario