Si la temporada pasada 2013-2014 el FC Cartagena venía de un bache deportivo después de salir derrotado en sus enfrentamientos con los dos líderes de aquellos días: La Hoya Lorca y Albacete Balompié, Luis García Tevenet manifestó: “tenemos que volver, a la senda de la victoria tras las dos derrotas, aunque no se nos ha ido la vida en ello. Seguimos con la misma dinámica y la misma ambición de volver a ganar para estar arriba". En esta de 20114-2015 se traslada hacia Arroyo de la Luz habiéndose situado en un socavón con once escalones que debe ascender para salir de él y situarse como líder de este Grupo IV de la 2ª B.
En aquel año, un dos del mes de febrero, acudía al campo del Arroyo de la Luz cuando los rumores de venta del club corrían de cantón en cantón y hasta la plantilla completa de jugadores y el cuerpo técnico conocía y hasta asumía: “somos realistas y prudentes. La plantilla ha mantenido la tranquilidad y confiamos en el trabajo de Fran, Cristina y Pedro Reverte”.
Y envueltos en este huracán se llegó al partido, que comenzó después de guardarse un minuto de silencio por Luis Aragonés. Tal era el huracán que los envolvía que, transcurridos 20 minutos de juego, tres jugadores cartageneristas: Mariano, Astrain y Antoñito ya habían visto la cartulina amarilla. Llegó el minuto 56 y Fernando adelantó a los cartageneristas, pero Abel Buades empataría para los locales a falta de diez minutos del término del partido. Finalizó el partido, 1-1, y con este marcador continuaba la distancia con La Hoya Lorca, pero el Albacete Balompié aumentaba en dos su ventaja con respecto al equipo cartagenerista.
Los dos refuerzos del mercado de invierno consiguieron entrar en su primera lista de convocados y hasta uno de ellos, Picón, defensa lateral diestro logró jugar como titular. El otro, Súper, se quedó en la grada. Pato, ex de FC Cartagena, se reencontró con su antiguo club para intentar dilucidar un duelo de clara necesidad por ambos bandos. Los locales rondaban puestos peligrosos y los de la Ciudad Portuaria estaban en lugares fuera de sus objetivos. El FC Cartagena tuvo que conformarse en Arroyo con un punto que le supo a poco a tenor de las necesidades del equipo albinegro, que ya acumulaba hasta tres jornadas sin ganar.
Una vez terminado el partido, en rueda de prensa improvisada, el torbellino de la actualidad cartagenerista, al margen de lo que sucedió en el terreno de juego, fue centro sobre el que se le preguntó a Fran de Paula antes de que la expedición blanquinegra regresase a la ciudad Trimilenaria: “Cada semana que pasa es más tranquila porque se dan pasos importantes para dar con la solución. Con Hacienda hemos hecho lo que nos pidieron teníamos que hacer y ahora toca esperar, pero no nos cerramos en ese punto sino que se están buscando otras vías con un plan A, un plan B y un plan C. Trabajamos en las oficinas para que los jugadores sigan trabajando como lo están haciendo en el campo, sin resentirse, que es como lo han hecho esta mañana aquí”.
Como ven, estimados lectores, nada ha cambiado y todo sigue igual. Dos cosas son diferentes; la situación deportiva, que está bastante peor que la temporada pasada, y la económica porque el club está en concurso de acreedores. Vale.
El Icue y…los arañazos de unos leoncillos
“La palabra fútbol en el diccionario tendría que llevar al lado la foto de Luis. Luis es el fútbol hecho hombre, el fútbol hecho persona”. (Xavi Hernández)
Esta frase escrita por Xavi Hernández en un artículo maravilloso en memoria de Luis Aragonés, sintetiza todo lo que representa el fútbol hecho, como él dice, hombre y persona y pasión y vida y sufrimiento y felicidad y liberación y…Y esto justamente lo recogen los periódicos y las redes sociales en esta mañana, en este día en el que nuestro Fútbol Cartagena, olvidándose del fútbol como arte y juego bonito, ha desarrollado solo actitud y buena disposición en el Municipal de Arroyo de la Luz en una mañana solanera de febrero y con actitud, sólo con actitud, no se ganan los partidos.
El Icue, con lo escuchado esta mañana, tiene la sensación de que para el Cartagena ha comenzado la cuenta atrás, sin saber si será positiva o negativa, sí temerosa y preocupante. En tres partidos, de nueve puntos, los de la Ciudad Trimilenaria sólo han conseguido uno, lo cual me hace pensar que lo que escribí al acabar el enfrentamiento de la semana pasada contra el Albacete Balompié comienza a parecer como real. Este equipo hace unas semanas corre como una gallina y no se ha dado cuenta de que le han cortado no sólo la cabeza, sino también los pies. Ya no se exhibe ni contra los gallitos del grupo, ni contra los equipos débiles, ni saben jugar de memoria como antaño. En estos momentos, siento decirlo, es un equipo plano y como decía un grandioso aficionado, mi amigo Guardi, en la retransmisión y ante el micrófono de Juan Pedro Hurtado: “Este equipo va a sufrir bastante”. Me ha dado pena escuchar esto al comprobar que cuando el rival exigía, las lagunas y la falta de ideas, y me temo que de proyecto, aparecían. Debutó Picón con demasiada lentitud, no aportando, me cuentan, absolutamente nada, sin acoplamiento, perdiendo balones y hasta haciendo recordar al soriano Alex Cacho. Si este es el Picón refuerzo, hay quien se va a quedar con el agredeño Alex Cacho. Le reconozco legitimidad para jugar, lo han fichado y ya está, pero de ahí a poseer talento futbolístico va un trecho. Volvían Astrain, Menudo y De Lerma, salían de inicio y estas variaciones, me dicen, tampoco aportaron demasiado.
Todo el partido transcurrió con suspense, con intensidad sí, pero un tanto atolondrado como si el sol cacereño hubiese tocado a nuestros jugadores con su mágica varita y los hubiese dejado como aturdidos, alocados, confusos y distraídos. El Cartagena de Tevenet no demostró, ni hasta que Fernando marcó el 0-1, minuto 56, ni después de marcar Arroyo el empate, minuto 83, que es mejor equipo que el Arroyo CP. Por lo que escuchaba me dio la sensación de ser un partido más vulgar que entretenido, nada espectacular y demasiado adormilado y hasta desprendiendo ese propio aroma de marmota todavía en estado invernal.
Yo sé, amigo Icue, que ver a nuestro equipo empatar después de venir de perder dos partidos seguidos no es nada que pueda gustarnos, espero que los resultados reflejen a partir de ahora, con contundencia, los claros e internos objetivos del club, para ver si puede encontrar su rumbo verdadero sin estériles parches. Había que sufrir y se sufrió. No se ganó, casi se pierde y se empató. ¡Ay, ay, ay!
Pedro-Roberto J.P. desde un “Rincón para Doce”. Dies 2/02: ante diem quartum Nonas Februarias. Nº 319.
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